
Alejandro L. J. fue detenido abusiva y arbitrariamente el día 20 de marzo de 2024 en Cosoleacaque, Veracruz, por policías de la Secretaría de Seguridad Pública, de quienes hasta donde se sabe ya fueron readscritos de lugar por los abusos que cometieron en la zona.
Luego de eso, fue puesto a disposición de la Licenciada Gertrudis Martínez Hernández, Fiscal Segunda de Minatitlán, dentro de la Carpeta de Investigación MIN/DXXI/F2/167/2024, quien posteriormente judicializaría el asunto ante la Licenciada Ariana Lisset Noriega Landa, Jueza de Control en Minatitlán, dentro del Proceso Penal 116/2024, por el delito de contra la salud, ya que la policía estatal le sembró bolistas de cristal, como usualmente hacen cuando una persona no se deja pisotear por ellos, lo que le consta a los testigos presenciales E. P. H., A. H. C., L. L. H., N. E. H. C., K. G., A. S. H. y una menor de edad, quienes igualmente fueron víctimas del abuso policiaco pero no se encuentran detenidos.

Desde la audiencia inicial de fecha 22 de marzo de 2024 se le expuso con datos de prueba a la Jueza de Control que Alejandro fue detenido en un lugar y hora diferente, pero pese a esto afirmó que la detención fue legal y no conforme con ello, ese mismo día impuso a Alejandro la prisión preventiva justificada, que actualmente lo mantiene detenido injustamente, evidenciándose como una trabajadora al servicio de unos cuantos policías de seguridad pública. En la continuación de esa audiencia celebrada el día 25 de marzo de 2024, posteriormente a que se vinculó a proceso a Alejandro, él solicitó la suspensión condicional del proceso, pero le fue negada por la Jueza porque consideró necesarios diversos informes que debe recabar la Fiscalía. A partir de entonces, se ha pretendido celebrar la audiencia de suspensión condicional del proceso en fechas 23 de abril de 2024, 23 de mayo de 2024 y 25 de junio de 2024, estando la Fiscal Gertrudis Hernández obligada a presentar los informes en cada una de estas fechas, lo cual le otorgaría la libertad a Alejandro.
Sin embargo, la Fiscal en incumplimiento de un deber legal ha sido omisa en presentar la información que la Jueza le ha ordenado, lo que no es raro en el actuar de la Fiscalía. Pero lo más grave es que la Jueza Ariana Lisset Noriega Landa parece que está pintada en las audiencias, pues dolosamente consiente todas esas omisiones del ministerio público aun cuando Alejandro se encuentra detenido injustamente y ha sido omisa hacer cumplir sus propios mandamientos judiciales. Tanto que incluso, la Jueza ni siquiera tenía programada en su agenda la audiencia del 23 de mayo de 2024 y omitió ordenar el traslado de Alejandro del Centro Penitenciario al Juzgado, de lo que existe constancia en el Juzgado a su cargo, por lo que esa audiencia no se celebró por un descuido de la propia Jueza.
Hoy, a casi 5 meses de encontrarse detenido de manera arbitraria, Alejandro se encuentra sin una fecha cierta para la audiencia que le daría la libertad porque el Juzgado de Minatitlán así lo dispuso y su familia se prepara para tomar las acciones legales correspondientes en contra de estas funcionarias, por incurrir en los delitos cometidos por servidores públicos en perjuicio de Alejandro L. J.
