Alejandro Lugo
No existe la menor duda que Minatitlán es un gran municipio, su riqueza cultural, gastronómica, natural y hasta la calidez de su gente lo hace distinguirse entre los 212 municipios que formal el estado de Veracruz, sin embargo, para asombro de muchos y tristeza de otros es de los más golpeados por ese mal conjunto que forma el gobierno y la corrupción.
Durante muchos años Minatitlán ha sido saqueado por sus exalcaldes que solo han utilizado la función pública para servirse con la cuchara grande, haciendo “obra” para después cobrar “moches” o simplemente para que sirvan de pantalla de un trabajo inútil que al poco tiempo está en destrucción total.
Y así es como llegamos a este municipio que se supone que florece, la cual hace escándalo de obras que ni gestionaron, ni hicieron ellos sino que viene de programas estatales de desarrollo, con obras para darle atole con el dedo a la población como de que trabajan pero lo que realmente importa no lo voltean a ver.
Muchos parque que le dieron una manita de gato y que costaron millones de pesos, corredor rivereño que ha sido reparado con “curitas” no con obra de alta ingeniería, eventos para darse baños de pueblo por tramitos de calles en colonias, pero ¿obra hidráulica? ¿Fomento a la inversión que activen la economía? ¿Empleos? De eso nada y para muestra una gráfica que muestra como el drenaje de aguas negras son descargadas en el río Coatzacoalcos con todo el descaro del mundo, ni siquiera son capaces de esconderlo, mismo río que sirvió el fin de semana como escenario deportivo donde los participantes en una etapa tuvieron que sumergirse en el agua negra ignorando el daño a la salud que esto significa.
Pablo Jair
